El vientre es la única zona del cuerpo que tiene la capacidad de dilatararse, ya que el organismo necesita compartir esta zona con los procesos internos de digestión y los ciclos menstruales. Pero si la actividad en el abdomen es permanente o excesiva indica desarreglos orgánicos. En ocasiones suelen ser resultado de gases intestinales. Entre otras, estreñimiemto.
Problemas frecuentes:
Exceso de peso.
Ocasiona frecuentes inflamaciones abdominales. Para bajar los kilos de más y lograr vientre plano es importante una alimentación sana y equilibrada en cantidades especificas; en segundo lugar, hacer una rutina de ejercicios.
Colitis.
Es la inflamación del colón y los intestinos. La integridad de los tejidos del aparato gastrointestinal se estropea debido al estrés y a la falta de actividad física, así como al deterioro de le flora intestinal benéfica. Corregir una colitis requiere manejar el estrés y hacer dieta especial.
Intolerancia a la lactosa.
Provoca distensión en la zona del abdomen. Algunos organismos no pueden digerir los productos lácteos de manera adecuada y consumirlos suele ocasionarles serios trastornos.
Acumulación de líquidos.
Produce una sensación de tracción en las partes laterales del abdomen. Se da en personas con insuficiencia cardíaca o hepática y es un signo de problemas graves. Suelen ir acompañadas de otros síntomas.
TERAPIAS NATURALES
Masajes.
El aceite de almendras es ideal para realizar un masaje suave en el vientre y así ayudar a la digestión y expulsión de gases. Poner unas gotas del aceite en las manos para entibiarlo. Acostarse y realizar la palma de la mano sobre el abdomen en forma circular (partiendo desde el ombligo) y siguiendo las agujas del reloj, ya que así es como tránsita la comida del tracto digestivo.
También es recomendable hacer ejercicio abdominales es lo mejor, ya que manter los músculos tonificados ayuda al estómago y al intestino a realizar más eficazmente su trabajo. Por otro lado, combinado con una dieta baja en grasas, son fundamentales para tener un vientre plano, duro y tonificado.
Herbolaria.
Luego de las comidas, son clásicas las infusiones de manzanilla, boldo, menta, entre otras hierbas, para evitar la inflamación.
Té verde.
Beneficioso después de una comida copiosa y rica en grasas. El té verde es un eficaz antioxidante, ayuda a prevenir el envejecimiento.
Te de rosa mosqueta.
Vigoriza la circulación de la sangre y remueve el estancamiento de los alimentos, especialmente las grasas. Se considera también un gran complemento vitamínico natural.
Nutrición.
Comer despacio y masticar bien. Esto ayuda a lograr una buena digestión, evitando que los alimentos permanezcan horas en el estómago y lo hagan lucir abultado.
Existen un mito: para conseguir un vientre plano es necesario dejar de comer. Es erróneo. Hay que comer bien y en cantidades suficientes. Evitar la comida chatarra, las bebidas gaseosas, las especies muy fuertes y picantes, el alcohol, el tabaco y el café.
Acupresion.
Para regular el sistema digestivo hay dos puntos a los que se puede recurrir; uno, localizado 5cm. arriba del ombligo, y el otro, en la rodilla.